lunes, 16 de marzo de 2015
Historia "corta" de como he llegado y sigo aquí
En las Navidades de 2013 fue cuando todo empezó. Por aquel entonces vivía en Inglaterra, algo que surgió como una aventura, pero que había salido relativamente bien: tenía un trabajo divertido que me daba para vivir, un novio tremendamente británico y un grupo de amigos que no se habían convertido aún en íntimos pero que habían tenido el detalle de adaptarme a sus vidas. Era casi completamente feliz.
Pero echaba de menos a mis padres, a mi perro, a los amigos que había dejado aquí y no me habían olvidado en cuanto me subí al avión en un primer momento. Por eso en las Navidades volví de visita.
Todo iba maravillosamente pero aparte de las fiestas y la diversión, aproveché para poner al día algunos asuntos: temas bancarios, dentista, revisiones médicas...
Tengo la mala suerte de haber visto a mi madre pasar un cáncer cuando era pequeñita pero también la gran suerte de haberla visto recuperarse y estar sana desde entonces. Pero al compartir genes y tener esta enfermedad un componente hereditario, me toca cada año revisión completa.
Esa Navidad algo iba a salir mal. Las pruebas de siempre salieron similares a años pasados, lo cual era buena señal. Pero la doctora, como era mi primera consulta con ella, decidió pedirme biopsia de prácticamente todo lo que podía pedir. Bueno, es por salud, por precaución, no me podía negar o quejar.
Los resultados fueron llegando y todos bien. El día antes de mi vuelo, llegaba el último, el de útero (nada que ver con lo que tuvo mi madre) así que no estaba apenas preocupada. Pero justo ese no estaba bien. "Células anormales de significado incierto". Significado incierto son seguramente las 2 palabras que más miedo me han dado en la vida. Mis padres cancelaron el vuelo al momento y esa misma tarde estaba en la consulta. Nuevas pruebas que dieron otra vez resultados no concluyentes pero indicativos de que había que seguir indagando. La tercera prueba tardaría 45 días en darme resultados, tiempo que decidí con todo el dolor de mi corazón, recoger mis cosas británicas y volverme a España, donde tenía un buen seguro médico y familia que me ayudarían si algo iba mal. Fue muy triste ver mi aventura esfumarse tan de repente y por esas razones; adiós a mi nueva vida recién estabilizada.
Lo más horrible fueron las esperas. Hacer una prueba y esperar 15 días. Y otra vez. Y otra. Así con varias a la vez. Mi doctora era muy simpática y mientras me pinchaba y torturaba con toda la delicadeza que podía, siempre me solía decir "Piensa en lo siguiente más divertido y entretenido que vayas a hacer".
Así supongo que se establecieron los que iban a ser mis botes salvavidas.
El primero, mi eterno amor: el Real Madrid. Mi equipo desde que me empezó a gustar el fútbol, incrementada la pasión después de que se llevaran al que también fue mi jugador favorito de mi tiempo de la Premier: Luka Modric. Desde el día en que vi mi primer partido del Tottenham, supe que siempre admiraría a ese pequeño genio. Su agilidad, su sutileza, su efectividad, las maravillas que se sacaba de la manga, los escasos pero mega-espectaculares goles que a veces metía... me cautivaron. Mi "colibrí" (como le llamaba cariñosamente) era el que me daba fuerza cada fin de semana. Lo "siguiente más divertido" que me solía pasar era un partido del Madrid y poder disfrutar de todos ellos, pero especialmente de Luka. Muchos ratos terribles de espera pasaron mejor gracias al fútbol y a las alegrías que nos iban dando ellos (la mayor y mejor, la Décima). Además, como otra estrategia de evasión, cree un club de fans para Luka sin saber qué iba a salir de ello pero que se confirmó como efectivo para mantener la cabeza en otras cosas.
Volviendo al presente... Han tenido que pasar 2 cirugías menores, 4 biopsias, demasiadas exploraciones para convertir el diagnostico de marzo de 2014 (lesiones precancerosas con alto riesgo de malignización) al diagnostico de enero 2015 (lesiones mínimas leves con riesgo bajo de malignización a corto plazo).
Mi vida inglesa esta totalmente perdida ya que no puedo volver al trabajo que dejé, mi novio (actual ex) no quiso estar cuando le necesité, nunca salió de él ni preguntarme como me encontraba y qué resultados iban saliendo y mi grupo de amigos han seguido su vida y yo ya no estoy en ella. Pero me da igual; estoy casi sana del todo y eso ha demostrado ser lo más importante. Con salud, surge el privilegio del tiempo, con tiempo siempre se pueden tener tantas nuevas aventuras!!!
Mi ángel de la guarda (futbolísticamente hablando), Lukita, sigue siendo el mejor. He tenido la enorme suerte e inmenso privilegio de poder "conocerle" (expediciones a Valdebebas con buen final) y contarle por carta todo esto. Él se ha portado siempre excesivamente bien conmigo y aquel club de fans terapéutico ha resultado ser muy de su agrado, siempre lo demuestra y nos da alegrías a todos (los 10.000 que ya somos ahí reunidos!!!). Ahora es su turno de estar medio pochillo por lesiones (aunque ya casi le tenemos de vuelta) y he hecho lo posible por estar apoyandole este tiempo. Él ha tenido detalles lindísimos de agradecimiento sin saber que le debo yo mucho más a él de lo que jamás él podrá deberme a mi. Aún así, gracias a mi buen ojo eligiendo ángeles, me siento muy orgullosa de este pequeño colibrí!
Y tras tooooooda esta parrafada, estoy aquí que (visto como me sentía a estas alturas del año pasado) ya es un triunfo!!!
lunes, 2 de marzo de 2015
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